Llevo una temporada enganchado al Candy Crush, el famoso jueguecito de las golosinas. Según parece, no soy yo solo, ya que en Julio alcanzó los 100 millones de descargas, que se dice pronto.
Candy Crush es un juego gratuito para plataformas móviles basado en el Tetris que consiste en formas filas o columnas de 3 ó mas golosinas iguales. Está basado en micropagos, es decir, en cada una de las pantallas tienes un objetivo a cumplir con un número limitado de movimientos, y si no llegas al objetivo, puedes comprar mas movimientos o algún tipo ayuda como caramelos especiales.
Es absolutamente adictivo y, a nada que os fijéis un poco, podéis ver a personas jugando en el metro, autobús o cualquier otro sitio donde estéis esperando un rato.
Alguien pensará que esto no es un videojuego, es más, algunos lo calificarán de "chorrada". Nada mas lejos de la realidad, los videojuegos están para entretener y en este caso, guste o no guste, hay que reconocer que Candy Crush lo consigue. Vale que no es un Call of Duty o un Gears Of War con sus presupuestos millonarios, pero Candy Crush demuestra que una buena idea no necesita de grandes presupuestos, gráficos deslumbrantes o profundos guiones. Lo que se busca en un videojuego es que te divierta y que puedas pasar un buen rato sin mas pretensiones que evadirte un poco del dia a dia y, en esto, Candy Crush es el rey.
Por contar mi experiencia con este juego, actualmente voy por el nivel 86 y no he tenido que pagar para pasar ningún nivel. Sólo he pagado en las ocasiones en la que se bloquea el acceso al siguiente nivel hasta que no te lo desbloquean 3 amigos por el Facebook o compras el acceso. Hasta ahora, solo me he encontrado en esta situación dos veces, es decir, he pagado 1.88 euros (2x0,89). Esto no es nada comparado con lo que pagamos por un juego de la PS3 o la 3DS que muchas veces no nos ofrecen tanta diversión.
Jugablemente no tiene mucho misterio, se utiliza el móvil, es decir, no necesitamos llevar encima ninguna consola; en un momento ya estás jugando; es sencillo (no hay que aprender 17 combinaciones de botones diferentes) y la mecánica es simple y adictiva. Sin duda alguna es una jugada maestra de King que le reporta diariamente millones de dolares de los usuarios.
Por poner una pega, hay que decir que es un poco repetitivo. Aunque según avanzamos nos vamos encontrando con diferentes retos y diferentes piezas en los niveles, al final, todo consiste en eliminar cuantos mas dulces mejor y puede llegar a cansar.
En fin, todo un acierto y, en mi opinión, un perfecto ejemplo de lo que tiene que ser un juego para móvil.
Un saludo,